El cobalto es un mineral muy tóxico pero muy demando porque detrás del cobalto se encuentra el coche eléctrico y el interés de los grandes fabricantes por tomar posiciones. El mineral potencia las propiedades del litio y es junto al níquel y el manganeso uno de los principales componentes de los baterías.
Desde mediados de 2015, su precio se ha triplicado y se sitúa ahora cerca de los 30 dólares por libra, el nivel más alto desde 2008. En lo que va de año, se ha encarecido un 80%.
UBS prevé que, en 2025, las ventas mundiales de coches eléctricos superen los 14 millones de unidades, frente a las algo menos de un millón de la actualidad. La firma CRU prevé que los fabricantes de baterías requieran en esa fecha un 80% más de cobalto que ahora.
Las mayores reservas mundiales se encuentran en el Congo, donde persiste la inestabilidad.
Fuente: Periódico Expansión